Bolskan íbera
Descubrimos los orígenes de la ciudad de Huesca Los orígenes de la ciudad de Huesca se remontan hace 6000 años, al Neolítico, cuando ya pudo haber asentamientos humanos en esta zona; si bien es a partir del siglo V a.C. cuando se establece un poblado de forma permanente. Eligen un lugar geográficamente privilegiado: sobre un cerro y cerca del río Isuela, para asegurarse una buena defensa y el acceso a recursos naturales para el cultivo. Se han encontrado restos de viviendas en la zona del Círculo Católico y sus alrededores, así como vestigios de un foso defensivo en el Coso Alto . Otro hallazgo arqueológico importante proviene de la avenida Martínez de Velasco, donde se localizaron restos de una necrópolis de incineración con sus correspondientes ajuares de cerámicas, adornos personales y armas, como puntas de lanza y falcatas de hierro que se doblaban antes de quemarlas junto con el difunto. También se encontró una escultura de piedra que representa al primer oscense que conocemo